Para los
geógrafos, la cartografía, a diferencia del mapa, que es una representación de
un todo estático, es un diseño que acompaña y se hace al mismo tiempo que los
movimientos de transformación del paisaje. Los paisajes
psicosociales son también cartografiables. La cartografía, en este caso,
acompaña y se hace mientras se desintegran ciertos mundos, pierden su sentido,
y se forman otros: mundos, que se crean para expresar afectos contemporáneos,
en relación a los cuales los universos vigentes se tornan obsoletos.
Suely
Rolnik