Cronos es el movimiento reglado de los presentes vastos y profundos. Pero, justamente, ¿de dónde saca su medida? ¿Tienen suficiente unidad los cuerpos que lo llenan, suficiente justicia y perfección su mezcla, como para que el presente disponga así de un principio de medida inmanente? Tal vez al nivel del Zeus cósmico. Pero ¿y para los cuerpos al azar y cada mezcla parcial? ¿Acaso no hay un disturbio fundamental del presente, es decir, un fondo que derroca y subvierte toda medida, un devenir-loco de las profundidades que se hurta al presente? Y este algo que hay de desmesurado, ¿es solamente local y parcial, o bien, poco a poco, no alcanza al universo entero, haciendo reinar por doquier su mezcla venenosa, monstruosa, subversión de Zeus o del mismo Cronos? ¿No está ya en los estoicos esta doble actitud respecto del mundo, confianza, y desconfianza, que se corresponde con los dos tipos de mezclas, la blanca mezcla que extendiéndose conserva, pero también la mezcla negra y confusa que altera? En los Pensamientos de Marco Aurelio resuena a menudo la alternativa: ¿es ésta la buena mezcla o la mala?
Saturno gruñe en el fondo de Zeus. El devenir puro y desmesurado de las cualidades amenaza desde el interior el orden de los cuerpos cualificados. Los cuerpos han perdido su medida y no son sino simulacros. El pasado y el futuro como fuerzas desencadenadas se toman la revancha, en un solo y mismo abismo que amenaza al presente, y a todo lo que existe.
Hemos visto cómo Platón expresaba este devenir, al final de la segunda hipótesis del Parménides: potencia de esquivar el presente (porque ser presente sería ser, y no ya devenir). Y sin embargo, Platón añade que «esquivar el presente» es lo que no puede hacer el devenir (porque deviene ahora, y no puede saltar por encima de este «ahora»). Los dos son verdaderos: la subversión interna del presente en el tiempo, el tiempo sólo puede expresarla a través del presente, precisamente porque es interna y profunda. La revancha del futuro y del pasado sobre el presente, Cronos debe también expresarla en términos de presente, los únicos términos que comprende y que le afectan.