Una potencia es una idiosincrasia de fuerzas tal que la dominante se transforma al pasar por las dominadas, y las dominadas al pasar por la dominante: centro de metamorfosis. Es lo que Lawrence llama un símbolo, un compuesto intensivo que vibra y se extiende, que no quiere decir nada, pero que nos hace revolotear hasta captar en todas las direcciones el máximo de fuerzas posibles, de las cuales cada una recibe sentidos nuevos al entrar en relación con las demás.