Los estratos engendran sus CsO, totalitarios y fascistas, terroríficas caricaturas del plan de consistencia. No basta, pues, con distinguir entre los Cs0 llenos en el plan de consistencia, y los Cso vacíos en los fragmentos de estratos, por desestratificación demasiado violenta. Pero todavía hay que tener en cuenta los Cso cancerosos en un estrato que ha devenido proliferante. Problemas de los tres cuerpos. Artaud decía que, fuera del "plan", había ese otro plan que nos envuelve "como una prolongación no esclarecida o como una amenaza, según los casos". Es una lucha, y como tal no implica la claridad suficiente. ¿Cómo fabricarse un Cs0 que no sea el Cs0 canceroso de un fascista en nosotros, o el Cs0 vacío de un drogadicto, de un paranoico o de un hipocondríaco? ¿Cómo distinguir los tres Cuerpos? Artaud no cesa de afrontar este problema. Extraordinaria composición de Para acabar con el juicio de Dios: empieza maldiciendo el cuerpo canceroso de América, el cuerpo de guerra y de dinero; denuncia los estratos, que él denomina "caca"; a ellos opone el verdadero Plan, incluso si es el minúsculo arroyo de los Tarahumaras, peyote; pero no ignora los peligros de una desestratificación demasiado brutal, imprudente. Artaud no cesa de afrontar todo eso, y perece en ello.